A la mente me vienen recuerdos, imágenes, vivencias que no se si son fruto de mi imaginación, o lo he vivido en primera persona. Son situaciones borrosas, efímeras, vagamente recordables, se pierden en el tiempo.
Recuerdo un lugar pequeño, cerrado, sin luz; estaba sola y no oía nada. A lo lejos me venían susurros de otra niña, mayor que yo, pero que todavía debería estar jugando con muñecas, escribiendo en su diario, cantando las canciones de sus artistas favoritos, viviendo. No era así, ni muchos menos: estaba triste, sufría, lloraba.
Son recuerdos fugaces y contradictorios: una respiración agitada, una somnolencia permanente, una agitación desmesurada, el sabor de un líquido agrio, fuerte, asqueroso.
- No, otra vez no mama.
- No tomes eso que no me gusta, que me agita, que me adormece, “que me pierde”…….. que me hace daño.
Ruidos, ajetreos, voces, golpes, y horas y horas de silencio, de sueño, de frío, de humedad, …..siempre igual.
Hubo un momento, no recuerdo cuando, en el que volví a relajarme, me dormí, soñé, me evadí de tanto trasiego. Fue un momento fugaz, pero se me hizo eterno, tan largo que aún lucho por recordar, quiero acordarme, necesito saber. No, no puede ser, no soy capaz, estoy echa un lío, ¡que alguien me ayude por favor!.
Después, no se, vi a muchas personas a mi alrededor, con batas, la boca tapada, con mucha sangre por todos lados. Respiré, no era igual, era otra sensación, me gustaba, será algo nuevo, sentí despertar del largo letargo.
Ahora estoy en otro habitáculo, es un poco más grande, una mesa, un sillón, unas imágenes al fondo, mi silla; el silencio continúa a pesar de que oigo ruidos, voces, risas, música. No se interpretarlos, no se que me quieren decir ….. no se, no recuerdo nada más.
Hoy, ha venido mi madre, me ha dicho que vamos a salir, que vamos a pasear, ¿Qué es eso?, ¿que ha querido decir?. Con una sonrisa cansada, enferma, triste, culpable, pero de amor, de sentimiento, de amabilidad, me pone en otra silla, esta se mueve, vamos hacia la puerta, se abre, ohhhh, que es esto, hay luz, ruido, árboles, personas olores, sensaciones; me gusta, me gusta mucho, quiero quedarme aquí para siempre, por favor mamá que esto no se acabe nunca.
No te preocupes mamá, yo no estoy aquí para culpabilizarte o para reprocharte nada, al contrario he venido para ver si puedo despertar en ti un halo de esperanza, de lucha, de vida, de libertad. Quiero que veas en mí a una amiga, a una compañera, a una hija.
Si pudiera hablar te diría cuanto te quiero, te agradecería que me .hayas dado la vida.
Si pudiera escribir reflejaría en un papel todos los sentimientos que tengo hacia ti.
Si pudiera andar, no dudes por un momento que te acompañaría al fin del mundo para buscar un lugar donde te pudieran ayudar, donde pudieras recobrar tú sonrisa de niña, esa paz que te mereces, esa vida que te estas perdiendo.
…………………Si pudiera
Me llamo Maria, tengo 14 años, padezco parálisis cerebral y mi madre es drogadicta, necesita ayuda.
.- “El consumo de drogas puede provocar serias alteraciones en el feto”
.- Más del 17% de los estudiantes de secundaria admitieron el consumo de drogas dentro del mes cuando fueron encuestados y más del 40% de ellos mayores de 12 años dicen que han probado alguna droga al menos una vez en sus vidas.
© capitantrueno
3 comentarios:
Ufff!! Capitán, que pedazo de realismo. Si me repongo le voy a recomendar a mis hijas adolescentas que lo lean.
Como en el juego de los barquitos: "tocada".
Un abrazo.
Es tan claro y tan duro que poco puedo comentar, pero a la vez son datos que deben divulgarse.
Un saludo.
Increíble, con 14 años...
Tengo la "gallina en piel".
Iba a decir Dios mío, pero no quiero usar lo divino para hablar de lo humano.
Tú haces que la vida merezca la pena.
Tienes la vida que otros no sabemos apreciar.
Muchas gracias por tus palabras y gracias a Rosa que me ha traído aquí sin saber, o sabiendo mucho.
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