sábado, 5 de noviembre de 2011

La culpa es tuya, y de ese, y de aquel, y del otro…. ¿mía? Noooooooo.

Echando un vistazo general a la prensa diaria, en uno de estos días que miras por la ventana y las nubes, el agua y el viento te dice que “más agustito estás tú aquí sentao; déjate de complicarte la vida por ahí perdido sin saber qué hacer ni a donde ir”; y cuando ya pasaba por encima de los titulares, algo me llamó la atención, una frase hizo que girara violentamente la cabeza, que abriera bruscamente los ojos y me quedara perplejo, sorprendido, boquiabierto, sin palabras:

“Un juez obliga a un joven «ni-ni» a dejar la casa familiar”; “Tiene 25 años, ni estudia ni trabaja y denunció a sus padres para conseguir una paga mensual de 400 euros”……….Ala, con dos cohone.

Se me llevaban los demonios; pensamientos duros airados, incluso violentos se me vinieron a la mente, sin duda este articulo alteró mi placido descanso matinal, y provocó el desencadenamiento de una rabia contenida que poco a poco fui controlando y dominando, tratando de asimilar y analizar esta noticia.

Tiene que ser duro, que como madre/padre que eres, cuando ya crees que vas encauzando y asentado lo que es el núcleo familiar; cuando piensas que ya queda poco para que todos y cada uno de sus miembros tome conciencia de su status dentro de este núcleo, y se vayan posicionando de cara al enfrentamiento con la realidad, con la vida misma, eso a lo que todos hemos tenido que enfrentarnos más tarde o más temprano, y que en la medida de lo posible hemos superado, va y te sale un güevazos como este, y decide unilateralmente que no le sale de los cohone hacer nada y que encima tú tienes la obligación de mantenerle hasta que él quiera, como él quiera y marcando el convenio salarial que él quiera.

Que algo está cambiando no cabe la menor duda; que valores familiares tan básicos como respeto, cariño, agradecimiento, amor, emotividad …., se fueron a hacer puñetas hace mucho tiempo es un hecho. Pero sería cuanto menos irresponsable intentar marcar como único y exclusivamente culpable a ese hijo que poco a poco hemos ido criando en la abundancia, en la tolerancia extrema, en la sobreprotección, al amparo del capricho continuo. Mimando, justificando, consintiendo…… malcriando; no nos vendría mal mirarnos un poquino y ver que estamos haciendo por y para nuestros hijos. HIJOS ¡SI!, no colegas, ni amigos, ni compañeros, ni camaradas, ni compadres….. ni ostias.

Nadie creo que eche de menos los viejos métodos de que “la letra con la sangre entra”, ni las técnicas pedagógicas de la época que algunos conocidos “educadores”, que con vara de olivo en ristre, regla, goma de butano, o mano abierta a secas, empleaban para educarnos en la formación del espíritu nacional, y para hacer de nosotros hombres hechos y derechos, y no mariquitas, como si la educación, el comportamiento, el saber estar y los valores tuvieran que ver algo con las tendencias sexuales. Pero una reflexión, incluso autocritica, por parte de todos los que se supone que tenemos alguna responsabilidad (padres, educadores, políticos) no nos vendría mal, porque al final seguro que todos llegaremos a la conclusión de que TODOS tenemos nuestra parte de culpa en este desaguisado.

Reflexión:

Un presumido estudiante que se encontraba en un autobús lleno hasta los topes se tomó la molestia de explicarle a un señor mayor sentado a su lado, porqué le es imposible a la vieja generación comprender a su generación.
-"Usted creció en un mundo diferente, realmente casi primitivo", dijo en voz lo suficientemente alta para que lo escucharan alrededor.

-"Los jóvenes de hoy crecimos con televisión, Internet, aviones, viajes al espacio, el hombre caminando en la luna. Nuestras sondas espaciales han visitado Marte...

- “Tenemos naves con energía nuclear y coches eléctricos y de hidrógeno.

- “Ordenadores que procesan datos casi a la velocidad de la luz... y más".

Luego de un breve silencio el señor mayor respondió lo que sigue:

-“Tienes razón, hijo mío. Nosotros no tuvimos esas cosas cuando éramos jóvenes ... ¡porque las inventamos!.
- “Ahora, arrogante joven, ¿qué estás haciendo TÚ para la próxima generación?".

………..se nos va de las manos.

Salud

2 comentarios:

Cris dijo...

Curioso concepto el del padre ni-ni pero cierto, muy cierto.
Me quedo con la última reflexión.

Me alegro de volver a verte en mi columnita de actualizaciones recientes. :)

capitantrueno dijo...

Gracias por tenerme todavía contigo.
Ya hacia tiempo, es verdad; y es que este joio trabajo me quita mucho tiempo.
Cuando tengo un ratino, entro a veros y leeros para alegrarme el día .

Haber si puede ser que por fin pueda dedicar tiempo para compartir con la buena gente.

Os echo de menos.

Salud