domingo, 3 de enero de 2010

“Envejecer es como escalar una gran montaña; mientras se sube las fuerzas disminuyen, pero la mirada es más libre, la vista más amplia y serena”.

Ingmar Bergman


¡¡¡Viejooooo!!!

Una voz entre el grupo sobresale de los demás.
Míralo, si parece que se va a desmontar el jodio changao.
¡¡Quédate en tú casa!!, que ya no estas pa estos trotes ¡¡A R R U G A A A A O!!

Y todos al unísono ríen, se burlan, ridiculizan, y vejan en la medida que su única neurona operativa, su falta de respeto, su ignorancia, su desprecio, su sinsentido les permite.

Mientras tanto, en el otro lado, el “viejo”, mira de soslayo, perplejo, sorprendido, sonriente …………apenado.
“Si lo que pretenden es hacerme daño, lo llevan claro”

Y recuerda.
Y vuelve a su infancia, cuando el se encontraba en el lugar de ellos.
Y vuelve a sonreír.
Y se siente orgulloso.
Y sabe que el no era así.
……..y vuelve a la realidad.

Y no entiende esa falta de respeto, ese descaro, esos insultos, esa ausencia de valores. Y piensa, y se da la vuelta, y les dice:

“Mira hijo, la vida es un tren que no para, y por mucho que te cueste comprenderlo, tú posiblemente, si la naturaleza te respeta serás viejo también, y eso no es malo sabes, es una etapa más que tendrás que recorrer.
Y si todo ha ido bien, y te has convertido en una persona adulta, coherente, comprensible, abierta, tú mente será capaz de comprender, respetar, admirar y querer”.

“Posiblemente yo sea viejo, pero esta jodia vejez me ha dado la serenidad, la tranquilidad, la experiencia, la madurez para ver la vida de otra manera, sin tapujos, sin censuras, sin mordazas. Diciendo lo que pienso, pensando lo que quiero; libre, diáfano, de cara”…………. Ojala, tú algún día puedas decir lo mismo.


Uno crece asimilando lo que deja por detrás,
construyendo lo que tiene por delante y
proyectando lo que puede ser el porvenir.
Crece cuando supera, se valora y sabe dar frutos.

Uno crece cuando abre camino dejando huellas,
asimila experiencias...
¡Y siembra raíces!

Uno crece cuando se impone metas,
sin importarle comentarios negativos, ni prejuicios,
cuando da ejemplos
sin importarle burlas, ni desdenes,
cuando cumple con su labor.

Uno crece cuando
se es fuerte por carácter,
sostenido por formación,
sensible por temperamento...
¡Y humano por nacimiento!

Uno crece cuando
enfrenta el invierno aunque pierda las hojas,
recoge flores aunque tengan espinas y
marca camino aunque se levante el polvo.

Uno crece cuando
se es capaz de afianzarse con
residuos de ilusiones,
capaz de perfumarse con residuos de flores...
¡Y de encenderse con residuos de amor!

Uno crece ayudando a sus semejantes,
conociéndose a sí mismo y
dándole a la vida más de lo que recibe.

Uno crece cuando se planta para no retroceder...
Cuando se defiende como águila para no dejar de volar...
Cuando se clava como ancla y se ilumina como estrella.
Entonces...

Uno Crece

Susana Carizza



Salud © capitantrueno

(canción: El viejo, de Asfalto)

3 comentarios:

Cris dijo...

Has vuelto!!! Y has vuelto en tu más puro estilo de los inicios!

No hace ser un anciano para que los niñatos te falten el respeto. A mí ya me ha pasado y no tengo ni 30... No sé muy bien por qué lo hacen, ni el tipo de educación que han recibido, pero espero que esto vaya a menos...
Con la supergeneración de Educadores que estamos sacando... :P

Besitos pa´ ti y pa´ tu loli!!!

capitantrueno dijo...

Una visita fugaz en estos días de sol y moscas; y es que no paro en casa.

Esta reflexión me ha venido por un detalle que vi el otro día en Merida (tú fijate, todavia no lo conocia). Unos niñatos se burlaban de un pobre hombre que estaba sentado a la sombra y solo habia cometido el terrible delito de ser mayor y llamarles la atención por estar zarandeando un arbol, sin buena intenciones, por supuesto.

Y nada, intentaré seguir en mi linea, aunque de vez en cuando coloque por ahí alguna chorrada.

Por cierto, mañana me voy seis dias con la bici a recorrer tierras de Toledo, Madrid, Avila y por supuesto el norte de Cáceres. Haber que tal se nos da, ya os contaré

Salud

Cris dijo...

Pues saca fotos, que luego nos las enseñes!

No conocías Mérida??? Yo hice 1º en la UNED de Mérida, y lo que no conozco es Trujillo. Pero de este verano no pasa!

Yo vi algo parecido el otro día: había unos críos (14-15 años) insultando a un hombre (unos 60 años), una situación parecida a la que cuentas. Pues resulta que me dijo una chica que lo había visto todo, que el hombre lo que había hecho era defender al chino de la multitienda de esos niños que le estaban intentando vacilar con el cambio. Y por meterse, encima, mira.

Pues nada. Me mola tu línea, aunque también las chorradas. Que se te de bien el viaje. Te lanz una exclusiva:
el miércoles (pasado mañana) es el cumple de Miniyó (haré un post sobre esto), y mis papis le han comprado la bici que quería. :)